Publicado en Miradas al Sur el 21/06/2015

PROBLEMAS EN LA CIUDAD

Al pueblo pero sin el pueblo


Felipe Deslarmes | El 15 de junio, la iglesia de la Santa Cruz fue el
 marco de un encuentro de organizaciones, comuneros y vecinos
donde se debatió sobre el “estancado proceso de descentralización
 y la actualidad comunal”.
Así, distintos espacios como las ONG Caminos Abiertos y Cultura
Abasto, las revistas Paso a paso y Primera página, el Movimiento 
Comunero y el Frente Migrante Organizado, entre otros, valoraron el 
espacio de debate y la reflexión plural y democrática que ofreció 
históricamente la iglesia donde se inició el movimiento Madres de 
Plaza de Mayo. El mismo espacio donde se reunieron asambleístas 
durante la crisis de 2001 y se realizaron fuertes debates sobre temas 
como la seguridad democrática o sobre el tipo de Estado posible que
se quería.
“La descentralización es una política de Estado que involucra a los
tres poderes. No es posible sin el compromiso de todos y la principal
responsabilidad recae en el Ejecutivo, que demostró su rechazo y
negativa a las comunas”, señaló Luis Cúneo, actual comunero (FpV)
de la Comuna 15.
Los temas centrales fueron la participación vecinal, la actualidad de
 los Consejos Consultivos y su vaciamiento por parte de los presidentes
 de las juntas comunales donde se mencionó el caso de la comuna 14,
 donde directamente crearon uno paralelo, a gusto con el PRO.
En medio del contexto de elecciones y con la presencia de candidatos
 a comuneros de partidos como ECO y el Frente de Izquierda, o 
vecinas de Recoleta enroladas en Mujeres X las Comunas, la discusión
por momentos se desbordó. Allí intervino para moderar una de las 
impulsoras de la reunión, María Suárez, actual comunera y candidata 
por el FpV en la Comuna 3, quien sostuvo que “la reunión buscó ser 
lo más heterogénea posible para conversar sobre estrategias para 
lograr instalar en la agenda de actores sociales y culturales de las 
comunas la descentralización pendiente, pero también compartir 
experiencias sobre la concentración de políticas públicas que realiza el
gobierno de la Ciudad y poner en conocimiento a los vecinos si es que
se cumplieron los alcances de la ley 1.777”. Respecto de la 
descentralización, Suárez concluye que “según manda la ley, la función
de los comuneros no existe como no existe la descentralización ni la 
participación de los consejos consultivos, porque no hay presupuesto
que se defina para cada comuna, que termina concentrándose en los 
ministerios”.
En diálogo con Miradas al Sur, Julieta Costa Díaz, comunera de
la 13, del Socialismo para la Victoria dentro del FpV, recordó que
lo que más le había entusiasmado cuando surgió la ley de comunas
era la posibilidad de democratizar el poder. “Me entusiasmaba que 
desde los barrios se pudiera descentralizar el poder y que cada uno
pudiera determinar cuánto se destina y a qué y con controles locales.
Aportaba transparencia, empoderaba a los vecinos para participar y
decidir cómo se utilizan los recursos económicos que generan. La 
idea de un cuerpo colegiado donde se pudieran confrontar ideas, 
porque estoy convencida de que de la confrontación y la cooperación
pueden salir grandes cosas”, afirmó, al tiempo que lamentaba que
esas expectativas con las que había asumido fueron derrumbándose 
una por una por manipulaciones del PRO que le hace perder una 
importante oportunidad a la sociedad al negarse a dar presupuesto a 
las comunas, aunque eso sea lo que indica la ley. “El propio 
secretario de Atención Ciudadana, Eduardo Macchiavelli, había 
presentado un plan de descentralización que nos parecía lento 
porque se tomaba dos años para dar presupuesto a las comunas, 
pero ni siquiera pudieron cumplir con el plan que ellos mismo trazaron”, 
acusa Costa Díaz, quien reconoce que los tres decretos que firmó 
Macri sobre la descentralización en las comunas “son casi idénticos y 
sólo mencionan la descentralización al principio, pero en realidad 
transfiere los fondos a la secretaría que dirige Macchiavelli, que no
giró los recursos a las comunas en complicidad con los presidentes
de todas las comunas, que casualmente son del PRO”.
Sobre las tomas de colegios, Suárez sostuvo que “el recorte
presupuestario en todas las áreas se notó también en Educación, 
como ocurre en Salud. En nuestra comuna tenemos varios colegios
tomados, como el Mariano Acosta, donde los alumnos tienen 
como padecimiento adicional el hostigamiento de la Policía 
Metropolitana”. Revisó también que tanto el Hospital Ramos Mejía
como el Ameghino parecen saqueados por la falta de financiamiento
y prácticamente no hay asistencia directa. “Respecto del tema 
residuos, hay comunas que están peores que otras. Aunque en la zona
norte tienen otro tratamiento porque se busca beneficiar la
especulación inmobiliaria, en la comuna 3, por ejemplo, no se aplica
Basura Cero ni siquiera en lo referente a la diferenciación de basura.”
Lamentablemente, el presidente de la Comuna 13, Gustavo
Acevedo (PRO), postergando permanentemente un contacto telefónico 
con este medio, se negó a dar su testimonio sobre su experiencia y 
punto de vista sobre la construcción del espacio político que preside,
argumentando estar en una serie de entrevistas que ni el candidato 
a jefe de gobierno tiene.